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Estreno de Vuelve Sebastiana
Sebastiana, niña pastora cuya curiosidad le lleva a adentrarse en el poblado vecino, el mundo prohibido y desconocido de los aymaras…
El primer film boliviano en ganar un premio internacional
Se re-estrenó en La Paz el semidocumental Vuelve Sebastiana dirigido por Jorge Ruiz, el filme, refleja la vida y tradiciones de la comunidad Chipaya.
La comunidad Chipaya, está asentada en Carangas Oruro, descendientes de la tribu de los Chulpas. Sebastiana Kespi es la protagonista principal de la historia, es una niña pastora cuya curiosidad le lleva a salir del pueblo y adentrarse en el poblado vecino, el mundo prohibido y desconocido de los aymaras.
Sebastiana Kespi protagonista del cortometraje
Un pueblo que antes los había sometido al aislamiento. En el hostil pueblo al pie del Tata Sabaya conoce a Jesús, un niño Aymara con el que entabla amistad. Pena y temor en su hogar porque Sebastiana no ha vuelto, su abuelo Esteban la busca e intenta convencerla de retornar, a través de relatos de la vida del pueblo años atrás cuando todo era próspero; cuando el padre de Sebastiana vivía aún.
Escena del rodaje en la comunidad Chipaya, producto del esfuerzo por la búsqueda, el abuelo cae enfermo y agonizante pide a su nieta dejarlo en el camino y regresar a la comunidad, al retornar la niña al pueblo, busca ayuda para traer al anciano pero él cae abatido por el esfuerzo. El film tiene como epílogo el ritual del entierro del viejo, el abuelo ha vuelto al seno de la madre tierra.
Vuelve Sebastiana ganó en 1956 el Primer Premio del Festival de Cine de la Alcaldía Municipal de La Paz, el mismo año gana el premio en el II Festival Internacional de Cine Documental y experimental del S.O.D.R.E. en Montevideo – Uruguay.
Escena del rodaje en la comunidad Chipaya
Vuelve Sebastiana es el primer film boliviano en obtener un premio internacional en la categoría Film Etnográfico – Folklórico.
Pero el crítico Carlos Mesa sostiene que «Vuelve Sebastiana es la película semi-argumental más importante que se ha filmado en Bolivia y la mejor realización de Jorge Ruiz en toda su carrera. Se trata de un film antropológico de media hora, en color, sobre los rasgos característicos de la vida de una antiquísima etnia, los chipayas, antecesores de quechuas y aymaras.
